Hace ya algunas décadas que el cambio de paradigma se ha hecho notar en las empresas. Una de las aristas que este nuevo escenario abarca es la valorización del Recurso Humano como fuente de capacidad y conocimiento.
La relevancia que se le ha dado a este componente empresarial ha logrado que a lo largo de los años los empresarios hayan buscado la motivación de los mismos, investigando y dedicándose a comprender la psicología de cada uno de ellos.
Muchos son los autores, como también los emprendedores, que han hablado en este último tiempo de “colaboradores”, haciendo referencia al personal en relación de dependencia que se diferencia de un empleado.
El colaborador se aparta de la burocracia, no se encuentra restringido por las jerarquías ni se ocupa de cumplir órdenes de superiores. Es mucho más que eso y abarca un concepto más independiente. Un colaborador hace honor a su denominación, colabora. Interactúa, está a la par de los dueños, empresarios, etc. Se capacita constantemente y forma parte del proceso de decisiones, opina y comparte sus ideas.
Para hablar de colaboradores y no de empleados se parte de la premisa de que todos aprendemos algo de los demás. Es por ello que se considera muy beneficioso compartir ideas y escucharse los unos a los otros.
El colaborador soluciona sin tener que cumplir con una burocracia establecida, gestiona y es incentivado a desarrollar sus ideas. De esto habla Ernesto Sandler, un reconocido escritor en el mundo de los emprendimientos. En sus libros este concepto es mencionado con gran frecuencia, casi olvidándose del término «empleado». Hace énfasis en la creación de relaciones laborales sólidas y amenas; empáticas.
Por otro lado, hay empresas jóvenes que han innovado y puesto en práctica esta nueva tendencia. Podemos mencionar a la diseñadora Florencia Dominguez, una emprendedora de la República Oriental del Uruguay que ha logrado insertarse en el mercado trabajando con conceptos.
Ella hace hincapié en todo momento en el recurso humano. Jamás menciona la palabra “empleados”; está segura de que trabaja a la par de colaboradores y así logra llevarlo a la práctica. Porque de eso se trata: llevarlo a la realidad y lograr que los colaboradores se sientan como tales.
«En el trabajo somos tan auténticos como nos permitan serlo»
